Las protecciones para la avifauna son un recurso de uso creciente en nuestro país, en el marco de una legislación que protege a los animales de accidentes contra tendidos eléctricos.
La península ibérica es una de las zonas más ricas en especies de aves de toda Europa. También es una de las más amenazadas en cuanto a pérdida de biodiversidad. Son dos los riesgos principales para la avifauna.
De acuerdo con la Fundación General del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) desaparecen diariamente casi cincuenta especies. Uno de los datos más relevantes de esta alarmante afirmación es que gran parte de la situación de vulnerabilidad a la que nos enfrentamos se debe a la electrocución de aves y a su colisión.
Principales riesgos de la electrocución de aves
Los sistemas de seguridad de la avifauna van enfocados a los conductores de alta tensión, que suponen el principal riesgo. La colisión de aves contra postes eléctricos es una de las causas más frecuentes de las muertes de muchas aves en peligro de extinción o situación de grave vulnerabilidad. Una de las especies más perjudicadas es el águila imperial. También es frecuente que la electrocución de las aves se produzca debido a que las de gran envergadura utilicen los postes eléctricos como posadero u oteadero, es decir, para descansar y observar a lo lejos.
Uno de los sistemas más utilizados para proteger a la avifauna de este peligro es el uso de material aislante polimérico, el cual reacciona muy bien ante la sobretensión, las variaciones de temperatura u otros elementos externos, como las posibles perforaciones por el posado de aves. En el caso de aisladores poliméricos, estos están fabricadas en base a un conjunto de núcleo de fibra de vidrio y envolvente en silicona, que tiene un menor impacto en el medio ambiente en caso de rotura comparado como por ejemplo con los de porcelana o vidrio que de fracturarse las partes que lo componen, una vez caen en suelo forestal pueden provocar incendios . El aislamiento polimérico como sistema de seguridad para la avifauna evita también que al no generarse contocircuitos se eviten problemas que deriven en falta de fluido del suministro eléctrico.
¿A qué especies en peligro de extinción afecta en la península ibérica?
La electrocución de aves afecta fundamentalmente a aves migratorias de gran envergadura, como las rapaces. Por ejemplo, el águila perdicera, la imperial o el águila-azor, todas ellas en grave amenaza, estando considerada la imperial como especie en peligro de extinción. Otra especie en la misma situación de vulnerabilidad que también se ve afectada por la colisión y por la electrocución es la cigüeña negra, que también se encuentra en peligro de extinción en la península ibérica.
Así mismo, podrían verse afectadas aves como el quebrantahuesos, el halcón tagarote o el milano real. Otras especies migratorias también se encuentran bajo amenaza a causa de los cableados eléctricos, como el zarapito real o el avetoro común. Ante esta situación, los sistemas de aislamiento para la protección de la avifauna se hacen insuficientes si no van de la mano de su ejecución práctica en cada comunidad autónoma, así como de la concienciación de la población a favor de la conservación de las especies, especialmente de las gravemente amenazadas.
¿De qué forma afectan los diferentes incidentes?
Los problemas más comunes del cableado eléctrico son la colisión y el posado u oteadero. En este último caso, la muerte es instantánea. No obstante, en el caso de las colisiones, las aves pueden sufrir más bien pérdidas o roturas de miembros de su cuerpo, siendo el ala una de las más comunes. Esto no lleva inmediatamente a la muerte, pero sí a su pérdida de habilidades fundamentales para la supervivencia, como la caza o la huida de otros depredadores. Por tanto, la amenaza sigue existiendo.
La cobertura de los conductores eléctricos mediante materiales aislantes ha demostrado una gran eficacia ante estos problemas. Normalmente, el comportamiento observado en las aves es el de llegada, aleteo, saltos y huida, reduciéndose las pérdidas de las diferentes especies en aquellos lugares en los que se han instalado suficientes sistemas de seguridad.
La protección de aves en peligro de extinción
En conclusión, la protección de aves en peligro de extinción de las amenazas del cableado eléctrico de alta tensión atiende a una necesidad urgente. Los sistemas de protección pretenden mitigar tanto la muerte de dichas aves como los daños que, posiblemente, también se traducirán en una muerte más lenta. Ante las alarmantes pérdidas cada año, además de las protecciones para la avifauna y la concienciación de la población en su conjunto para la conservación de las aves, se hace necesario un impulso a las empresas que elaboran proyectos de gran envergadura relacionados con la electricidad.
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